La escasez de agua potable
Uno de los problemas más graves a los que nos
hemos visto enfrentados en las últimas décadas es la escasez de agua potable.
Aunque el planeta Tierra está cubierto en un 75% por agua, es muy poca la que
sirve para el consumo humano y para actividades tan importantes como la
agricultura. El 97,5% del agua que hay en el mundo es salada y sólo el 2,5% es
dulce. No es difícil imaginarnos la importancia que tiene el agua en nuestra
vida diaria; la utilizamos, por ejemplo, para beber, para cultivar alimentos y
para bañarnos. En el último medio siglo, el ser humano ha triplicado el uso de
agua dulce; esto se debe, en parte, al crecimiento de la población, al
desarrollo de la industria y a la expansión de la agricultura.
Pero el
problema no es sólo la escasez de agua dulce sino las dificultades para acceder
al agua potable, es decir, agua con el tratamiento necesario para que la
bebamos sin correr el riesgo de adquirir enfermedades. En las últimas décadas
ha aumentado considerablemente la cobertura de agua potable en el mundo, pero
aun así existen alrededor de 1.100 millones de personas que no tienen acceso a
agua tratada, especialmente en Asia y África.
El problema de acceso al agua potable es de
gran importancia, especialmente si tenemos en cuenta que las enfermedades
trasmitidas a través del agua causan la muerte de un niño cada ocho segundos y
que el 80% de las enfermedades que se producen en los países en desarrollo se
deben a este mismo problema.
Hoy en
día sufren, por escasez de agua, más de 80 países que representan cerca del 40%
de los seres humanos sobre nuestro planeta. Esta situación puede seguir
empeorando en la medida en que aumente la población mundial, y el calentamiento
global afecte los ciclos naturales del agua —como por ejemplo las
precipitaciones—. De hecho, se ha estimado que, a menos que se tomen serias
medidas, es posible que en 25 años la mitad de la población del mundo tenga dificultades
para encontrar agua dulce suficiente para el consumo humano y la agricultura.
Escasez
de tiempo
Existen
muchos seres humanos en el mundo buscando satisfacer sus deseos y es imposible
pensar que podamos tener todo cuanto queramos. Pero no sólo los recursos y los
bienes materiales son escasos; también, el tiempo que utilizamos para realizar
nuestras actividades diarias es finito, y por eso siempre debemos estar tomando
decisiones acerca de cómo usarlo de la mejor manera posible. Debemos decidir cuánto
tiempo más queremos dormir, si dedicamos las horas después del colegio a jugar
o a estudiar, o si utilizamos nuestras horas libres para ayudar en nuestra casa
o para ver televisión.
Si no hubiera restricciones de tiempo para
realizar todas las actividades que deseamos, podríamos, primero, hacer la
tarea, luego jugar, ver televisión y dormir. Pero la cantidad de horas en el
día no nos permite hacer todo lo que desearíamos, al igual que los meses, los
años y finalmente la duración de la vida humana.
Esto significa que cada una de las decisiones
acerca de las actividades que realizamos implica el sacrificio de otras
actividades; por ejemplo, si decidimos salir a jugar vamos a pasar un buen
rato, pero vamos a dejar de hacer las tareas que nos permiten mejorar nuestro
desempeño académico, y después vienen las angustias. De esta manera, evaluar
las implicaciones que tiene cada una de nuestras decisiones nos permite estar
conscientes de la responsabilidad de nuestros actos y encontrar las mejores
soluciones al problema de la escasez de tiempo.
1 comentario:
La escasez es la base de la adquisición!!
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