lunes, 26 de agosto de 2013

DINASTIAS CHINAS


Dinastía Xia (1994- 1776  a. C.)

La tradición dice que los Xia (1994-1766  a.C.) fueron la primera dinastía china hereditaria, que sólo desapareció cuando fue expulsado su último gobernante debido al poder tiránico que ejerció sobre su pueblo. Sin embargo, no hay restos arqueológicos que confirmen esta historia; y la primera dinastía de la cual hay evidencias históricas es la Shang.

Dinastía Shang (1776- 1027  a. C.)

La dinastía Shang gobernó en el territorio que ocupan las actuales provincias de Henan, Hubei, Shandong y la parte septentrional de Anhui, en el centro y norte de China. La capital, desde alrededor del 1384 a.C. en adelante, estaba situada en Anyang cerca de la frontera norte de Henan. La economía estaba basada en la agricultura; se cultivaba mijo, trigo, cebada y posiblemente arroz. También se cuidaban gusanos de seda, y se criaban cerdos, perros, ovejas y bueyes. Se han encontrado recipientes de bronce, armas y otras herramientas, lo cual indica el conocimiento de la metalurgia y la existencia de artesanía. La sociedad creada por los Shang era aristocrática. Al frente estaba el rey, que presidía una nobleza militar y elegía a los gobernantes territoriales, que estaban obligados a ayudarle en sus empresas militares. Entre esta clase aristocrática y los plebeyos había un estrato sacerdotal culto que se ocupaba de los documentos de gobierno y era responsable de la adivinación. Los Shang adoraban a sus antepasados y a una multitud de dioses, el principal de los cuales era conocido como Shang Ti, 'el Señor en lo Alto'.

El relato de la caída de la dinastía Shang que aparece en las historias tradicionales chinas sigue el modelo legendario de la defección de los Xia. El último monarca Shang, un tirano cruel y libertino, fue expulsado por un enérgico Zhou de un estado en el valle del río Wei. Situada en las franjas noroccidentales del dominio Shang, la cultura de los Zhou era una síntesis de los elementos básicos de la civilización Shang y ciertas tradiciones marciales características de los pueblos no chinos del norte y del oeste

Dinastía Zhou

Bajo el gobierno de la Dinastía Zhou la cultura china se extendió hacia el sur hasta el valle del Yangtse y hacia el este hasta el mar. La primera capital de la dinastía fue Hao, cerca de la actual Xi´an.

En el año 771 a.C. las tribus nómadas, junto con príncipes feudales descontentos, invaden el valle de Wei, destruyen la capital y matan al rey. El hijo del rey muerto funda la capital de la dinastía Zhou del Este en Luoyang. Los Zhou vieron debilitarse el poder de esta Dinastía, que duró hasta el año 221 a.C.

La dinastía Zhou se divide en dos períodos: el período de Primavera y Otoño (771-475 a.C.) y el de los Reinos Combatientes (475-221a.C.). Los emperadores Zhou fueron desde este momento simplemente figuras decorativas; los jefes locales gozaban de una gran independencia, razón por la que mantenían diferentes luchas entre sí. Es en este período cuando surgen varias filosofías y religiones que dominarán la China posterior como es el caso del Confusionismo y el Taoísmo.

Dinastía Quin

El estado de anarquía, debido a la debilidad de la dinastía Zhou, se adueñó de todo el territorio. De las continuas luchas surge una dinastía efímera, que toma el nombre de uno de los Reinos Combatientes del norte, Qin (221-207). El emperador más importante de esta Dinastía fue Shi Huangdi, el primer emperador que unificó el Imperio. Establece la capital en Xianyang, al oeste de la actual Xi´an. Este sometió a los gobernantes en lucha y se apoderó del poder, convirtiéndolo en un poder centralizado. Gracias a los legalistas se suprime el poder feudal. En este tiempo se unifica la escritura, el sistema de pesos y medidas, la unidad monetaria y la imposición de determinadas leyes. Para ello, Shi Huangdi ataca a los doctores del confusionismo y ordena quemar los clásicos de la literatura y filosofía china. Pero la memoria y los ejemplares ocultos se encargaron de la pervivencia de estas artes. Para defenderse de las tribus nómadas, en el año 215, a.C. se inicia la construcción de la Gran Muralla en el norte de China.

Dinastía Han

Estuvo en el poder desde el año 206 a.C. hasta el 220 d.C. El primer emperador fue Liu Bang que tuvo como capital la actual Xi´an. Se distinguen dos dinastías: la del Oeste (206 a.C.-24) y la del Este (25-220) cuya capital era a la vez Luoyang. Es la época de la expansión territorial, pero aún más importante la del desarrollo político y cultural del país. Uno de los descubrimientos más importantes de esta época fue el papel.

La era de esplendor tuvo lugar bajo el reinado del emperador Han Wudi (140-87 a. C.), cuando el imperio se extiende al norte, manteniendo la frontera contra las tribus nómadas de los hunos, conquistando el territorio de la actual Corea, aumentando el comercio con el oeste a través del Turquestán y abriendo el comercio con Asia central, a través de la célebre Ruta de la Seda. En el sur se someten los territorios de Guangzhou.

Asimismo se restablece el confusionismo y las enseñanzas clásicas chinas, floreciendo en esta época el budismo, que había penetrado en China, desde la India, a través de la Ruta de la Seda.

Pero esta Dinastía se fue debilitando en sus últimos años. Desde el 220, final de la dinastía Han, hasta el comienzo de la dinastía Sui, se sucedieron diversos Estados: Los Tres Reinos y la Dinastía Jin del Oeste y del Este, los Dieciséis Reinos y las Dinastías del Norte y del Sur

Dinastía Sui

En el 581 la dinastía Sui toma el poder y, aunque reinó poco tiempo, logró reunificar el Imperio y reorganizar la administración. Norte y Sur dejan de estar divididos, y con el inicio de la construcción del Gran Canal intercambian sus mercancías. La dinastía fue derrocada por una rebelión popular. En el año 618 un antiguo general de esta Dinastía funda la Dinastía Tang.

Dinastía Tang

Las fronteras se extienden hacia el oeste; es una época de florecimiento cultural con la aparición de poemas como Chu-ci. Se mantienen contactos con Japón, Corea y con los árabes. Pero esta Dinastía, al igual que las anteriores, también tuvo momentos de debilidad, siendo interrumpida por los reinados llamados tradicionalmente las Cinco Dinastías y los Diez Reinos

Dinastía Song

A continuación, en el año 960 sube al poder la Dinastía Song, que se divide en una dinastía del norte y otra del sur. Fomenta las artes y renueva la cultura. Se considera la época de esplendor absoluto de la civilización china. También tuvo su época de luchas con los pueblos esteparios; en el 1127 los Nüzhen conquistan Kaifeng y fundan la dinastía de los Jin. Los Song se retiran al sur. En el año 1279 desaparece la dinastía Song del sur.

Dinastía Yuan

En el siglo XIII China se ve invadida por los mongoles. En 1234 derriban a los Jin, y en 1271 conquistan a los Song del Sur. China, en 1279, con la conquista de la provincia de Guangdong, entra a formar parte del Imperio Mongol, que unía por vez primera partes de Europa y Asia.

Kublai Khan, nieto de Gengis Khan, funda la dinastía Yuan. La gran extensión del Imperio mongol propicia el contacto con las regiones occidentales y meridionales.

Dinastía Ming

Zhu Yuanzhang expulsa a los mongoles y funda la dinastía Ming (1368-1644), subiendo al poder como emperador Taizu en 1368. Establece la capital en Nanjing, expulsando de Beijing al emperador de la dinastía Yuan. El tercer emperador Ming vuelve a establecer la capitalidad en Beijing. Se recuperan las antiguas fronteras y se inicia una actividad marítima que llega hasta las costas de Arabia y de Africa. Florecen las bellas artes, principalmente la porcelana y la arquitectura.

A comienzos del siglo XVI los portugueses se establecen en Macao. A finales de este mismo siglo los jesuitas promueven el contacto entre China y Europa.

Dinastía Qing

Los manchures, una nueva tribu del norte, penetra en China a comienzos del siglo XVII, solicitados por un grupo de chinos, y en 1644 el hijo de un jefe manchú es erigido emperador de la última dinastía china, los Qing.

Se ensanchan las fronteras y el imperio chino llega a su apogeo en algunos aspectos. En 1662 se conquista Taiwan, se incorpora el Tíbet y el Turkestán Oriental (Xinjiang).

Fin de las dinastías

La amenaza a la dinastía Qing vino de Europa. El comercio europeo en el siglo XVIII se concentraba en Macao y era creciente; es cuando empieza a manifestarse la superioridad militar y material de Europa. En 1840 se desencadena la Guerra del Opio entre China y Gran Bretaña, que termina en agosto de 1842 con el Tratado de Nanking, por el que se cedía Hong Kong a Gran Bretaña y se abrían al comercio Guangzhou y otras ciudades. En 1844 se firman tratados con Estados Unidos y Francia por los que se reconoce el derecho de extraterritorialidad a los europeos. En 1858 estalla otra nueva guerra del opio. En 1860 el Palacio de Verano es destruido, firmándose un nuevo tratado muy ventajoso para las potencias europeas. En 1900 el movimiento de los Boxers es abatido por las potencias extranjeras. Finalmente en 1911 la Dinastía Qing es derrocada por la Liga Republicana Revolucionaria, acabando así el reinado de los Hijos del Cielo que había comenzado en el año 2000 a. C.

sábado, 17 de agosto de 2013

miércoles, 14 de agosto de 2013

jueves, 8 de agosto de 2013

GRECIA ANTIGUA

La civilización helénica de la Grecia antigua se extendió por la Península Balcánica, las islas del mar Egeo y las costas de la península de Anatolia, en la actual Turquía, constituyendo la llamada Hélade. La civilización helénica o griega tiene su origen en las culturas cretense y micénica.

Hacia el 2700 a.C. se desarrolló en la isla de Creta una rica y floreciente cultura comercial perteneciente a la Edad del Bronce. Esta cultura recibe el nombre de minoica o cretense. En torno al año 1600 a.C., los aqueos, un pueblo de habla griega y de origen indoeuropeo, irrumpieron en el territorio de la Grecia continental, estableciéndose en el extremo noreste de la península del Peloponeso. Este pueblo llegó a dominar a los cretenses. Su ciudad más importante fue Micenas.

Hacia el año 1200 a.C., otro pueblo de origen griego, los dorios, que utilizaban armas de hierro, se apoderaron de Grecia derrotando a los micenios. La guerra de Troya, descrita por Homero en la Iliada, fue, probablemente, uno de los conflictos bélicos que tuvieron relación con esta invasión. Esparta y Corinto se transformaron en las principales ciudades dóricas. Con los dorios empezó un período de retroceso cultural que se conoce con el nombre de Edad oscura.

Después de la conquista de los dorios, la vida en toda Grecia descendió a un nivel muy primitivo, y así se mantuvo durante varios cientos de años. Sin embargo, desde el siglo VIII y hasta el siglo VI a.C., período que se conoce como época arcaica, Grecia desarrolló y culminó una gran recuperación política, económica y cultural. Ligas de Atenas y Esparta

Tal recuperación fue posible gracias a la organización en ciudades Estado (polis) y a la fundación de colonias en las costas de Asia Menor y del mar Negro, en Sicilia, en el sur de Italia, en el sur de Francia y en el levante español.

Las nuevas colonias se convirtieron en polis políticamente independientes de la metrópoli (polis madre), pero mantuvieron estrechos vínculos religiosos, económicos y culturales. Estas colonias fueron uno de los factores del desarrollo económico de Grecia en este período.

Los siglos V y IV a.C. corresponden al apogeo de las grandes ciudades estado independientes, entre las que destacan las polis de Atenas y Esparta.

Cada uno de estos grandes estados absorbió a sus débiles vecinos en una liga o confederación dirigida bajo su control. Esparta, estado militarizado y aristocrático, estableció su poder a base de conquistas y gobernó sus estados súbditos con un control muy estricto. La unificación del Ática, por el contrario, se realizó de forma pacífica y de mutuo acuerdo bajo la dirección de Atenas.

Al principio del período, los griegos se unieron para derrotar a los temidos persas en las llamadas guerras médicas. Tras la victoria, Atenas se convirtió en la potencia hegemónica de la Liga de Delos, alianza que se había formado para defenderse de los persas. En política interior los atenienses consolidaron el sistema político conocido con el nombre de democracia, gobierno del pueblo, y en política exterior se convirtieron en la gran potencia político-militar de la Hélade, lo que les acarreó gran número enemigos. Este periodo es denominado como la 'Edad de Oro de Atenas', o 'Siglo de Pericles' en honor al gobernante que llevó a Atenas a su máximo esplendor.

Durante el mandato de Pericles se construyeron el Partenón, el Erecteion y otros grandes edificios. El teatro griego alcanzó su máxima expresión con las obras trágicas de autores como Esquilo, Sófocles y Eurípides, y el autor de comedias Aristófanes. Tucídides y Heródoto fueron famosos historiadores, y el filósofo Sócrates fue otra figura de la Atenas de Pericles quien hizo de la ciudad un centro artístico y cultural sin rival.

Las diferencias entre Atenas y Esparta desembocaron en la destructora guerra del Peloponeso, en la que participaron casi todos los griegos unidos a uno u otro bando. La guerra duró hasta el 404 a.C. y acabó con la derrota de los atenienses y el establecimiento de la hegemonía espartana sobre Grecia.

Aprovechando la confusión y debilidad de los contendientes en las Guerras del Peloponeso, el rey Filipo II de Macedonia convirtió su reino en la nueva potencia de la Hélade. Macedonia no estaba desgastada por las luchas y disponía de recursos naturales (cereales, oro y madera). La batalla de Queronea (338 a.C.) le permitió anexionarse Atenas y Tebas. Tras la muerte de Filipo II, su hijo Alejandro Magno, conquistó Persia y dirigió sus ejércitos hacia Egipto y la India, formando un gran imperio.

Tras su muerte en Babilonia (323 a.C.) sus generales se repartieron sus posesiones. Con Alejandro desaparecía el antiguo poder de los griegos, pero no su cultura que, fusionada con la oriental, dio origen al mundo helenístico.

 

lunes, 5 de agosto de 2013